miércoles, 4 de junio de 2008

Domingo X de Tiempo Ordinario - A-


Monición de entrada
El Señor es nuestra luz y nuestra salvación. Nos encontramos un domingo más alrededor del altar con la convicción de que Jesús es nuestra luz. EI que nos revela la mirada amorosa del Padre. EI que nos hace ver a todos los que nos rodean con la mirada amorosa de Dios. Un Dios que nos acoge siempre, que nos alimenta con su palabra y con la carne y la sangre de su Hijo, como una madre alimenta a sus hijos. Con esta convicción, nada podemos temer, nada puede debilitar nuestra fe.
Nos ponemos en pie y recibamos al celebrante cantando…

S. La gracia y la paz de parte de Dios, nuestro Padre, y de Jesucristo, el Señor, estén con todos ustedes.

A. penitencial:
Que la luz del Espíritu ilumine nuestros corazones y nos convierta, antes de escuchar la Palabra de Dios y de celebrar el memorial del Señor. Oremos en silencio. (Silencio)
- Tú, que no has venido a condenar sino a perdonar:
SEÑOR, TEN PIEDAD.
- Tú, que has dicho que hay gran fiesta en el cielo por un pecador que se convierte: CRISTO, TEN PIEDAD.
- Tú, que perdonas mucho a quien mucho ama:
SEÑOR, TENPIEDAD.

Gloria

Monición a las lecturas

1. Hoy escucharemos un fragmento de la profecía de Oseas. Este profeta habla de la relación entre Dios y su pueblo en términos de relación de pareja. EI pueblo acaba por ser infiel a Dios, pero Dios no deja de amar a su pueblo incondicionalmente, absolutamente. Y Ie pide el esfuerzo de amarlo de igual manera. EI salmo 49, que cantaremos después, insiste en que Dios no necesita sacrificios, sino el amor de su pueblo.
2. Pablo recuerda a los cristianos de Roma que Abrahán y Sara respondieron a la promesa de Dios con una fe firme. La misma fe que debemos tener nosotros que creemos en la realización de la promesa: la resurrección de Jesús, que murió por nuestros pecados.

LECTURA DEL LIBRO DE OSEAS 6, 3b-6
Esforcémonos por conocer al Señor: su amanecer es como la aurora y su sentencia surge como la luz. Bajará sobre nosotros como lluvia temprana, como lluvia tardía que empapa la tierra. “¿Qué haré de ti, Efraín? ¿Qué haré de ti, Judá? Su amor es como nube mañanera, como rocío matinal que se evapora. Por eso los herí por medio de los profetas, los condené con la palabra de mi boca. Porque yo quiero amor, y no sacrificios, conocimiento de Dios más que holocaustos”.
Palabra de Dios. R. Te alabamos, Señor.

SALMO 49
R.- AL QUE SIGUE BUEN CAMINO LE HARÉ VER LA SALVACIÓN DE DIOS
El Dios de los dioses, el Señor habla: convoca la tierra de Oriente al Occidente. No te reprocho tus sacrificios, pues siempre están tus holocaustos ante mí. R.-

Si tuviera hambre, no te lo diría, pues el orbe y cuanto lo llena es mío.¿Comeré yo carne toros, beberé sangre de cabritos? R.-

Ofrece a Dios un sacrificio de alabanza, cumple tus votos al Altísimo, e invócame el día del peligro, yo te libraré y tú me darás gloria. R.-

LECTURA DE LA CARTA DEL APÓSTOL SAN PABLO A LOS ROMANOS 4, 18-25
Hermanos:
Abraham, esperando contra toda esperanza, creyó, y llegó a ser padre de muchas naciones, según lo que se le había dicho:
--Así será tu descendencia
No vaciló en la fe, aun dándose cuenta de que su cuerpo ya sin vigor –tenía unos cien años--, y el seno de Sara, igualmente estéril. Ante la promesa de Dios no fue incrédulo, sino que se hizo fuerte en la fe, dando con ello gloria a Dios, al persuadirse de que Dios es capaz de hacer lo que promete. Por lo cual le valió la justificación.
Y no sólo por él está escrito “le valió”, sino también por nosotros, a quienes nos valdrá si creemos en el que resucitó de entre los muertos a nuestro Señor Jesús, que fue entregado por nuestros pecados y resucitado para nuestra justificación.
Palabra de Dios. R. Te alabamos, Señor.

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 9, 9- 13
En aquel tiempo, vio Jesús al pasar a un hombre llamado Mateo, sentado al mostrador de los impuestos, y le dijo: “sígueme”.
Él se levantó y lo siguió. Y, estando Jesús a la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores, que habían acudido, se sentaron a comer con Él y sus discípulos. Los fariseos, al verlo, preguntaron a los discípulos:
“¿Cómo es que su Maestro come con publicanos y pecadores?”.
Jesús lo oyó y dijo: “ No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos. Vayan, aprendan lo que significa: “misericordia quiero y no sacrificios”, que no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores.
Palabra del Señor. R. Gloria a ti, Señor Jesús.

HEMOS DE ACOGER A TODOS, COMO JESÚS
Mateo, el recaudador de impuestos era considerado “publicano". Los judíos detestaban a sus compatriotas “publicanos". Los consideraban traidores a la patria y pecadores públicos por colaborar con el invasor romano. Nadie quería tener trato con ellos. A un hombre de semejante reputación, Jesús dirige una perentoria llamada: ¡Sígueme!.
EI mensaje de hoy es reconfortante por demás: Todos los pecadores somos llamados por Dios, en la persona de Jesús, a la fe, a la conversión, al compromiso por el Reino. Y esto ocurre no por nuestros méritos -¡somos pecadores!•, sino por el amor misericordioso de Jesús que no vino a llamar a los justos, sino a los pecadores.
Todos somos "'Mateo" y sus compañeros publicanos. Todos -en mayor o menor medida- “recaudamos” las más variadas miserias morales. Pero no desesperemos jamás. La mirada de Jesús sobre nuestras vidas no es la mirada descalificadora de los juicios condenatorios, sino la mirada de la misericordia que transforma la vida. Jesús es concluyente: “yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores".
La Iglesia no es un club de gente "'inmaculada", autosatisfecha, aislada de los demás para no contaminarse. Santa como es, la Iglesia está toda ella compuesta de pecadores perdonados. EI Señor misericordioso quiere verse reflejado en sus seguidores. EI nos llama con el mismo gesto compasivo y amoroso con que llama a Mateo, y quiere que tengamos con los demás idéntica actitud de comprensión, amor y misericordia. Hemos de acoger a todos; también a los considerados parias e intocables. Ellos son también hijos de Dios y hermanos nuestros.

Oración universal:
Hermanos y hermanas, hagamos nuestros los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de toda la humanidad, y oremos por ella. Unámonos a cada petición, diciendo:
R. TE LO PEDIMOS, SEÑOR.
1. Por todos los cristianos que seamos generosos al servicio del Evangelio y de los hermanos. Roguemos al Señor. R.
2. Por los sacerdotes; para que en el sacramento de la confesión, ofrezcan, en nombre de Dios, la misericordia y el perdón. Roguemos al Señor. R.
3. Por los dirigentes de los pueblos; que trabajen en bien de todos los ciudadanos. Roguemos al Señor. R.
4. Por quienes sufren a causa de cualquier tribulación; que no desfallezcan en su esperanza. Roguemos al Señor. R.
5. Por todos nosotros; que recibamos la bendición del Señor. Roguemos al Señor. R.
S. Dios, que amas la humanidad, concédenos lo que te pedimos. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Lecturas de la semana
Lunes 09 : 1R 17,1-6; Sal 120; Mt 5,1-12
Martes 10: 1R 17,7-16; Sal 4; Mt 5,13-16
Miércoles 11: Hch 11, 21b-26; 13,1-3; Sal 97; Mt 10, 7-13
San Bernabé, apóstol. Memoria obligatoria
Jueves 12: 1R 18,41-46; Sal 64; Mt 5,20-26
Viernes 13: Sab 7,7-14; Sal 39; Ef 4,7-15;Mc 16,15-20
San Antonio de Padua, presbítero y doctor de la Iglesia. Fiesta
Sábado 14: 1R 19,19-21; Sal 15; Mt 5,33-37

No hay comentarios:

  CELEBRAMOS LA NAVIDAD EN NUESTRA INSTITUCIÓN EDUCATIVA   I.                      DATOS INFORMATIVOS:   1.1. INSTITUCION EDUCATI...